El 23 de abril pasado, miles y miles de personas se volcaron a las calles de la Ciudad de Buenos Aires y también de otras localidades importantes en el resto de las provincias, para rechazar los recortes al presupuesto de las universidades. Ese escenario está por repetirse y en el gobierno nacional subsiste la preocupación por la marcha prevista para el miércoles próximo por la tarde que preparan los sectores ligados a las universidades; esta vezpara expresar su rechazo al anunciado veto total a la ley que sancionó el Congreso con la intención de reforzar el financiamiento.
En las filas libertarias se hicieron esfuerzos, sobre todo en las comunicaciones oficiales, para desactivar el efecto que tendrá la movilización, desde que se conoció la convocatoria que impulsan desde el Consejo Interuniversitario Nacional (CIN), que incluye a los rectores de las universidades públicas; el Frente Sindical de Universidades Nacionales, personal docente y no docente de las altas casas de estudio, y la Federación Universitaria Argentina, que integran alumnos. El reclamo será multitudinario porque a ellos se sumarán sectores políticos y sindicales de la oposición.
En ese contexto se enmarca también el acto que Javier Milei diagramó el sábado, cuando se lanzó a La Libertad Avanza como partido nacional: sirvió para mostrar una señal de fortaleza hacia las propias filas, encolumnadas detrás de la decisión del Presidente de que “no hay plata” para darles a los universitarios el aumento que solicitan
La cantidad de estudiantes
En las últimas horas, el secretario de Educación, Carlos Torrendell, se sumó a esa ofensiva para debilitar la protesta. “Hay 600.000 alumnos en las universidades nacionales que no sabemos si están inscriptos en alguna materia o no, el 38 % de los alumnos, y los fondos se dan a partir del número total de estudiantes”, expresó como modo de contrarrestar los pedidos de recomposición salarial.
“Inventar alumnos es un tema que tiene más o menos 200 años, porque la multiplicación de los cargos docentes tiene que ver con eso. Ha pasado en las primarias, secundarias y puede estar pasando en las universidades, sobre todo cuando hay facultades que empiezan a perder alumnos”, amplió. Y lamentó que se haya rechazado la oferta del Ejecutivo de un 5,8% de incremento para octubre. Los distintos sectores universitarios consideran que desde la asunción de Milei sus ingresos cayeron un 70 por ciento.