El diputado provincial arremetió contra el proyecto del Presidente: “Es un ajuste salvaje disfrazado de modernidad que beneficia sólo a los grandes grupos económicos”.
De manera categórica y contundente, el diputado provincial Juan Carlos Ledesma, referente del espacio Fuerza Patria, se pronunció en total disidencia con el proyecto de reforma laboral impulsado por el presidente Javier Milei, calificándolo como “una vuelta de tuerca más en el plan sistemático para desguazar el Estado de Bienestar y entregar a los trabajadores argentinos atados de pies y manos a la voracidad del mercado”.
Ledesma, en declaraciones exclusivas a través de sus redes sociales, no ahorró críticas: “Lo que el Gobierno nacional llama ‘modernización’ y ‘flexibilización’ no es más que el eufemismo para encubrir un ataque frontal a los derechos laborales conquistados tras décadas de lucha sindical y social. Este proyecto no busca crear empleo digno; busca precarizar la vida de millones de argentinos”.
A la misma vez el legislador enumeró los puntos más críticos de la iniciativa oficial: “Pretenden extender el período de prueba a seis meses, o incluso más. Esto significa que un trabajador podrá ser despedido sin causa y sin indemnización durante medio año, fomentando la rotación y la inseguridad laboral. Es la consagración del empleo descartable” y agregó que también buscan “Reducir las indemnizaciones por despido es un incentivo perverso para el facilismo patronal. Abarata el costo de echar a alguien a la calle, profundizando la injusticia en un momento de crisis”.
Para el legislador oficialista, “Atacan la libertad sindical, buscan obstaculizar el derecho a huelga y debilitar a los gremios. Quieren dejar a los trabajadores sin su herramienta fundamental de defensa. Es una medida autoritaria que silencia las voces disidentes”.
“Este proyecto”, continuó Ledesma, “es un calco de los manuales más ortodoxos del neoliberalismo que ya hemos padecido en los ’90 y que tanto daño nos hicieron. No es casualidad que los únicos que celebran estas medidas son los grandes grupos concentrados de la economía, los mismos que se llenan de ganancias mientras el pueblo sufre el ajuste”.
“Este no es el camino para un país serio”, concluyó Ledesma con tono firme. “El camino es generar trabajo registrado, con salarios dignos que recuperen el poder adquisitivo, y fortalecer la industria nacional. No condenando a nuestros trabajadores a la incertidumbre y a la pobreza. Lo que Milei llama ‘libertad’ para los trabajadores es, en realidad, la libertad para ser explotados. Nosotros no vamos a permitirlo. La Patria no se vende, se defiende”, concluyó.