Daniel Ricardo Carías, más conocido como “La Tota Santillán”, fue hallado muerto ayer por la noche en su casa de Castelar Norte por personal de la Comisaría 7° de Morón de la Policía Bonaerense, luego de un llamado al 911 que alertaba de la situación.
Al llegar al domicilio en la esquina de García y Tucumán, los policías se encontraron con familiares, amigos y conocidos que aseguraron que “La Tota” no respondía mensajes y llamados hace varios días. Así, corrieron a su casa. Continuaron con las llamadas: el teléfono del animador que fue durante años la cara del popular programa Pasión de Sábado, un ícono de la escena de la cumbia y la movida tropical, sonaba del otro lado de la puerta.
Así, el fiscal Patricio Ventricelli, de turno en la jurisdicción, autorizó que la Policía Bonaerense rompa la puerta. Al entrar, vieron al animador muerto, con gran cantidad de quemaduras en su cadáver, rodeado de fósforos, en medio de los restos de un incendio que cortó la luz de la casa.
“Prácticamente todo el cuerpo estaba quemado”, asegura una fuente clave del caso a este medio.
Allí, los familiares hablaron: aseguraron que La Tota se encontraba “muy depresivo por problemas económicos y por la condena que había recibido por violencia de géneroa mediados de 2023.